Fases del benchmarking competitivo

Comparar el rendimiento, los procedimientos y los resultados de nuestra empresa con los de los rivales es un proceso metódico conocido como benchmarking competitivo.

Para llevar a cabo con éxito una evaluación comparativa competitiva es necesario seguir una serie de pasos cruciales.

Definir los objetivos de la evaluación comparativa

Es fundamental contar con objetivos específicos y cuantificables antes de iniciar cualquier iniciativa de evaluación comparativa. ¿Cuáles son los objetivos de la evaluación comparativa competitiva? ¿Deseamos encontrar formas de eclipsar a nuestros rivales en el sector? ¿O es posible que queramos reforzar nuestra posición en un área determinada de nuestra empresa? Establecer objetivos claros nos permitirá concentrar nuestros esfuerzos y producir resultados tangibles.

Examine su empresa

Es importante realizar un examen exhaustivo de nuestra propia empresa antes de establecer comparaciones con otras empresas. Examine sus ventajas y desventajas, señale sus puntos más fuertes y débiles y determine en qué se diferencia de la competencia. Esta etapa nos permite reconocer las áreas en las que aún debemos desarrollarnos.

Elegir las empresas a examinar

En esta etapa, debemos decidir en qué empresas rivales se centrará nuestra investigación de evaluación comparativa. 

Las empresas que son líderes en las áreas que deseamos mejorar y que son significativas en nuestro mercado deben ser nuestra primera opción. Encontrar y analizar a los competidores adecuados nos proporcionará información útil.

Especificar los datos que se van a recopilar

Para obtener resultados útiles de la evaluación comparativa, es esencial decidir qué métricas y datos vamos a recopilar.

Entre otras cosas, estos datos pueden incluir el precio, la calidad del producto, los planes de marketing, las medidas de rendimiento operativo y los datos de mercado. Nuestra comparación será más exhaustiva y las conclusiones más precisas cuantos más datos pertinentes recopilemos.

Examinar la información recopilada

Tras obtener los datos, es necesario realizar un análisis exhaustivo. Analizar la información, sacar conclusiones y buscar tendencias, patrones y distinciones dignas de mención entre nuestra empresa y los rivales. 

Este estudio nos ayudará a encontrar áreas en las que podemos mejorar y superar a nuestra competencia, dándonos información útil sobre cómo lo están haciendo en comparación con nosotros.

Determinar oportunidades procesables

A la luz de los resultados del análisis, es hora de determinar qué perspectivas son las más prometedoras para el desarrollo y el progreso. 

Estas oportunidades pueden tener que ver con la innovación de productos, mejoras de la interfaz, tácticas de marketing y otras cosas. 

Las posibilidades que encontremos durante esta fase deben ser accionables, lo que significa que debemos ser capaces de llevarlas a cabo y ver beneficios observables.